Según un estudio europeo
realizado por investigadores belgas, holandeses, suecos e irlandeses, nuestros
antepasados de la época victoriana eran más inteligentes que nosotros. El
tiempo de reacción de los seres humanos se ha visto relentecido desde 1889
hasta ahora en occidente, y que esto estaría relacionado con un descenso del
cociente intelectual, que habría disminuido 14 puntos, es decir, 1,23 puntos
por década. Esto supone un descenso de la inteligencia, la productividad y la
creatividad en nuestros días. Y contradice al llamado efecto Flynn, según el
cual el cociente intelectual de la población ha tendido a aumentar cada año desde
la Segunda Guerra Mundial.
Los educadores y científicos
habían empezado a advertir que el hombre se estaba haciendo cada vez más
dependiente de la información en Internet, pero hasta ahora había pocos
estudios que lo confirmaran. Una investigación de la psicóloga Betsy Sparrow,
profesora adjunta de la Universidad de Columbia en Nueva York (EE UU), revela
que Internet funciona como una "memoria externa" que nos hace retener
cada vez menos información.
Sparrow se preguntó si
internet estaba desempeñando ese papel para todo el mundo, a modo de una gran
memoria colectiva y, junto con su equipo, hizo una serie de experimentos con
más de un centenar de estudiantes de Harvard para examinar la relación entre la
memoria humana, la retentiva de datos e Internet. El equipo descubrió que
cuando los participantes no sabían las respuestas a las preguntas
automáticamente pensaron en su ordenador como el lugar para encontrar esa
información.
Además, averiguaron que si
los estudiantes sabían que la información podría estar disponible en otro
momento o que podrían volver a buscarla con la misma facilidad, no recordaban
tan bien la respuesta como cuando creían que la información no estaría
disponible. Otro de los patrones de comportamiento que subrayan en el estudio
es que la gente no recuerda necesariamente cómo obtuvieron cierta información
siempre y cuando recuerden qué era. Sin embargo, sí tiende a recordar dónde
encontraron los datos que necesitan cuando no son capaces de recordar
exactamente la información.
El estudio sugiere que la
población ha comenzado a utilizar internet como su "banco personal de
datos", un fenómeno conocido como "efecto Google", y los
ordenadores y los motores de búsqueda on line se han convertido en una especie
de sistema de "memoria externo" al puede accederse a voluntad del
usuario y al que la memoria humana se está adaptando.
Esto no sugiere, desde mi
punto de vista, que sea bueno o malo sólo que no es funcional ya que si en
algún momento la Red llegase a colapsar o hubiera un Apagón Mundial, no
sabríamos que hacer ya que todo lo estamos dejando en manos de un ordenador con
internet. Por otro lado no hay que olvidar los grandes beneficios de la Internet
como poder encontrar cualquier información en cualquier momento.
Así que no hay que satanizar esto, solo sirve de reflexión y nos ofrece una posible perspectiva para el futuro cercano.
Así que no hay que satanizar esto, solo sirve de reflexión y nos ofrece una posible perspectiva para el futuro cercano.
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